Se oyen todo tipo de opiniones sobre lo que es invertir en bolsa. Muchos dicen que es demasiado arriesgado, otros dicen que es una forma muy simple de hacerse millonario y otros concluyen que no merece la pena. Lo cierto es que las tres opiniones pueden ser correctas, todo depende de las inversiones que realices y del momento en que las hagas.
En este artículo se muestra una guía completa de cómo empezar a invertir en bolsa y no morir en el intento. Se explicarán todos los conceptos claves y los pasos que debes de seguir para empezar a invertir en el mercado de valores.
Para empezar, podemos describir la bolsa como un mercado. Dependiendo del ámbito al que nos refiramos, podamos hablar de un mercado nacional o internacional. En la bolsa se venden una serie de productos en forma de acciones, de ahí que podamos referirnos a la bolsa como al mercado.
La función principal de la bolsa es ayudar a conseguir dinero para que las empresas puedan desarrollar sus actividades. Las empresas venden sus acciones a un precio que consideren adecuado, de modo que parte de la propiedad de estas, pasa a otra persona. De este modo consiguen dinero para seguir con sus actividades, mientras que los accionistas obtienen rentabilidad si el valor de la empresa sube.
Antes de mostrarte cómo empezar a invertir en bolsa, es necesario que sepas cómo funciona. La bolsa, tal y como se ha indicado, es un espacio donde las empresas y los inversores venden y compran acciones.
El funcionamiento de la bolsa, a grandes rasgos (ya que no podemos analizar todo en detalle en este artículo), es bastante sencillo. Las empresas dividen su propiedad en acciones y estas son las que son vendidas en la bolsa. El precio de las acciones tiene un valor de partida, pero la subida y bajada de este depende del mercado. Los inversores decidirán si comprar o no acciones de una determinada empresa en base a sus análisis o a lo que estimen que va a pasar con dicha empresa.
Las grandes empresas entran en bolsa porque esto les permite obtener dinero líquido para continuar con su desarrollo. Sin el dinero de los inversores, el capital teórico de la empresa sería el mismo (lo que vale la empresa no variaría), pero el capital en dinero real sería mucho menor.
Cuando un inversor compra acciones de una empresa se convierte en accionista, es decir, es propietario parcial de la empresa. El hecho de haber aportado dinero líquido a la empresa a cambio de una parte de la propiedad de la misma, le da ciertas ventajas en forma de posibles beneficios:
Mediante estos dos mecanismos los inversores pueden obtener beneficios al invertir en acciones y al mismo tiempo las empresas consiguen dinero líquido para continuar con sus operaciones.
Algo que debes tener en cuenta y que, debido a la popularidad de las criptomonedas, muchos nuevos inversores desconocen, es que la bolsa tiene horarios de apertura, es decir, no está abierta continuamente. Dependiendo de la región desde la que inviertas y el mercado en el que decidas operar, los horarios serán diferentes y es importante que los conozcas para poder sacarle a este el máximo partido.
Ahora que ya conoces lo que es la bolsa y cómo funciona, es momento de aprender cómo empezar a invertir en bolsa. El primer paso para poder empezar a invertir es que respondas un par de preguntas:
¿Tienes intención de obtener rentabilidad de tus inversiones a corto plazo o a largo plazo?
¿Qué riesgo estás dispuesto a asumir?
En función de tu respuesta a estas preguntas, te convendrá invertir en un tipo de acciones u otras. A continuación, se muestran los instrumentos financieros que te convienen en función de tu perfil de inversor.
Si eres un inversor a largo plazo, te conviene invertir en activos estables, que, a la larga, si todo va como debería, van a dar una buena rentabilidad. No obtendrás una rentabilidad exagerada, pero a la larga puede significar grandes beneficios.
Una de las mejores inversiones para este tipo de inversores son los fondos indexados y los ETFs.
Como estamos hablando de la bolsa y de la inversión en acciones, vamos a tratar los ETFs. Los fondos indexados y los ETF funcionan de la misma manera, aunque con ciertas diferencias fiscales.
Un ETF es un fondo índice cotizado. De forma más sencilla, un ETF es una bolsa en la que hay incluidas un montón de empresas, de modo que comprar una acción de un ETF te estará permitiendo tener fracciones de acciones de muchas empresas diferentes. Es una forma muy buena de diversificar y de invertir a largo plazo, ya que las comisiones son muy bajas.
Las empresas contenidas en estos ETF no están elegidas al azar, sino que los ETFs replican un índice. Esto significa que el valor del ETF subirá o bajará según se mueva el mercado. Por ejemplo, un ETF que replique el índice SP&500 invertirá en acciones de las 500 empresas más importantes de USA. Los ETFs son una de las opciones más elegidas por los inversores a largo plazo.
Las acciones clásicas también son una muy buena forma de invertir. De hecho, muchos grandes inversores viven de los dividendos que le generan sus acciones. Sin embargo, diversificar comprando acciones requeriría de una gran inversión, cosa que la mayoría de inversores novatos no tienen.
Para este tipo de inversores, el procedimiento a seguir es completamente diferente. A un inversor a largo plazo le basta con unos conocimientos básicos sobre inversión, ya que la intención es comprar los activos y no tocarlos en un período largo de tiempo, sin embargo, para ser inversor a corto plazo hay que dedicarle mucho más tiempo al mercado.
La compra de acciones y los CFDs, son los instrumentos financieros más frecuentemente elegidos por los inversores a corto plazo. Ya hemos indicado lo que son las acciones, pero no lo que son los CFDs. Los CFDs son contratos por diferencia y son un instrumento financiero que te permite obtener beneficios (o pérdidas) en función de las fluctuaciones de un valor, sin necesidad de poseerlo. Con los CFDs inviertes a la subida o bajada de un valor y no al valor en sí. Se trata de un instrumento complejo que puede hacerte ganar mucho dinero, pero que también conlleva muchos riesgos.
Si eres novato, lo recomendable es que empieces operando con acciones, incluso con acciones fraccionadas (porciones de una acción) y cuando adquieras soltura con la plataforma de inversión y con los diferentes conceptos que se utilizan en este ámbito, empezar a probar con los CFDs.
Esto es algo que debes plantearte muy bien antes de empezar a operar en bolsa. Nadie regala dinero, grábate esto a fuego. Si quiere obtener una gran rentabilidad de tus inversiones es necesario que asumas riesgos. Debido a esta ley del mercado, es importante que tengas claro el riesgo que estás dispuesto a asumir antes de empezar a operar, ya que no todas las inversiones tienen el mismo riesgo ni la misma rentabilidad.
Si tienes un buen sueldo y quieres dedicar parte de este a invertir, sin importarte demasiado lo que pueda pasar con este dinero, puedes asumir riesgos mayores. Invertir en valores más volátiles te permitirá tener la posibilidad de obtener más beneficios, pero también tendrás que asumir más riesgos.
Por el contrario, si inviertes con el objetivo de ahorrar, lo más recomendable es que hagas inversiones en activos más o menos estables, que te darán una rentabilidad baja, pero con las que asumirás riesgos también bajos.
El broche de oro para esta guía es un tutorial paso por paso de cómo invertir en bolsa. A medida que avances por los diferentes pasos te darás cuenta de que es mucho más sencillo de lo que parece y que todo es bastante intuitivo.
Tal y como se explicó anteriormente, es imprescindible que tengas claro el riesgo que vas a asumir y la cantidad de dinero que vas a invertir antes de entrar en el mercado. Si piensas eso una vez que estás en el mercado, es probable que te dejes llevar por un impulso de novato y acabes haciendo una mala inversión. Analiza tu situación y elabora un plan de inversión en función de tus objetivos y tus capacidades.
Si quieres operar en bolsa, será necesario que lo hagas a través de un bróker. Existen muchas opciones en el mercado y cada una de ellas tiene sus ventajas y desventajas. Parámetros como las comisiones, los instrumentos financieros disponibles o los métodos de pago admitidos, son algunos de los que debes tener en cuenta para elegir el mejor bróker para ti.
En apartados anteriores hemos mencionado los diferentes instrumentos financieros que puedes elegir para operar en bolsa. Elige el que más se adapte a tu perfil de inversor. Recuerda que algunos como los CFDs están enfocados a inversores más experimentados, por tanto, si eres novato, lo mejor es que no empieces con este.
Cuando tengas claro todo lo que quieres hacer con tu dinero y cómo quieres empezar tu camino como inversor, es momento de llevar la teoría a la realidad. Tras depositar fondos en el bróker que hayas seleccionado, dirígete al buscador y selecciona el activo en que tenías planeado invertir y tramita la operación. Diversificar es una muy buena opción, por lo que, si puedes dividir tus fondos en varios activos, reducirás riesgos.
Este último paso dependerá del tipo de inversor que seas. Si eres un inversor a largo plazo, conocer el estado del mercado a diario es bastante irrelevante para ti. Sin embargo, si tu intención es operar a corto plazo, conocer lo que pasa en el mercado y cómo evolucionan los diferentes índices y activos es importante. Analizar y entender el mercado es clave si quieres maximizar tus ganancias al invertir en bolsa.
Invertir en bolsa es una actividad cada vez es más popular, sin embargo, hacerlo a lo loco solo te llevará a perder tus ahorros. Es cierto que la inversión puede darte una muy buena rentabilidad, pero para ello tienes que saber en qué, cómo y cuándo invertir.
En esta guía se recoge, brevemente, lo que necesitas saber para empezar a invertir en bolsa, aunque este es solo el principio. No dudes en seguir aprendiendo sobre la bolsa, sobre el mercado y sobre cómo invertir. Aprende a analizar el mercado y, a largo plazo, podrás conseguir esa ansiada libertad económica.
¿Qué estudiar para invertir en bolsa?
Siendo sinceros, ninguna carrera universitaria te enseñará a cómo invertir en bolsa. Es cierto que carreras como economía te ayudarán a sentar una base y a conocer conceptos que se utilizan en la inversión bursátil, sin embargo, en ninguna asignatura aprenderás a operar en bolsa. Leer a otros inversores, estudiar el mercado y saber analizarlo y entenderlo, es lo único que necesitas para poder invertir en bolsa.
¿Debo invertir a corto plazo o a largo plazo?
Todo dependerá de lo que quieras conseguir con tus inversiones. Si tu intención es ahorrar y no asumir demasiados riesgos, invertir a largo plazo es para ti. Por el contrario, si quieres hacer de la bolsa tu forma de vida, o si quieres obtener beneficios de forma diaria/semanal, tendrás que optar por la inversión a corto plazo. Este método de inversión requiere de un mayor entendimiento del mercado que la inversión a largo plazo.
Un método no es mejor que otro. Cada inversor deberá elegir el que más le conviene según su perfil y sus objetivos.
¿Cuánto invertir en acciones?
No hay una cifra adecuada para invertir en bolsa. Todo dependerá de tu situación, de tu patrimonio, de si inviertes a corto o a largo plazo y del riesgo que estás dispuesto a asumir. En tu situación 1.000 € puede ser mucho dinero y en la de otro puede ser una cantidad muy baja. Cada inversor tiene que analizar su situación e invertir en función de esta.
Asesor experto y Revisor de Contenido en MoneyMow
El Dr. Sunil Lalchandani es doctor en economía, comercio y negocios internacionales. Ha escrito más de diez libros y decenas de artículos científicos sobre contabilidad, finanzas y economía.
Actualmente, el Dr. Sunil imparte clases en la universidad de Chandibai Himathmal Mansukhani, donde también es profesor de doctorado y coordinador de investigación. En adición, el Dr. Sunil es miembro de una gran cantidad de cuerpos académicos internacionales, entre los que destaca el Harvard Business Review, del que es miembro asesor.
En MoneyMow, el Dr. Sunil apoya nuestra labor divulgativa sobre finanzas revisando el contenido de cada artículo que es publicado y aportando su expertise a las ideas transmitidas en cada post.
Redactor y entusiasta de las finanzas
Ángel es licenciado en análisis de datos y big data, redactor profesional y especialista SEO. Una de sus temáticas preferidas son las finanzas. Desde adolescente, Ángel ha sido un ávido lector de todo lo relacionado con cómo llevar a cabo una gestión efectiva del dinero: inversión a largo plazo, inversión inmobiliaria, el estudio de los ciclos económicos, entre muchos otros. Tan es así, que en 2015 quedó en el primer puesto en el concurso finance challenge, organizado por la Universidad de Salamanca.
En MoneyMow, Ángel se encarga de la redacción de contenidos en español con la ayuda de nuestro equipo financiero.